La mañana ha empezado muy tempranito, con esto de dormir con gente responsable algo se nos está pegando.
Hemos desayunado en el albergue un cafelito y hemos tirado a andar hasta que los recogimos a todos en unos cuantos kms.
La calor ya había empezado a apretar y se pasaba bastante mal en el camino. En Palas do Rey tuvimos que hacer una parada de urgencia para el súper amaiketako con el litrito de cerveza porque ya la calor era imposible.
Entre bosques de eucaliptos y sol, mucho sol, fuimos andando como buenamente pudimos hasta Melide.
A Melide llegamos sobre las 18 y nos fuimos para el albergue municipal, pero al estar tan asquerosito, tener un par de pulperías en el pueblo, y que cerraba a las 23, nos fuimos a otro albergue de pago Luis, Roy y yo y Mónica y Laura.
En un par de horitas estábamos todos en la garnatxa con unos platitos de pulpo y el riveiro. Nos habían recomendado el Ezequiel pero no pudimos ir porque estaba cerrado los lunes.
Tras unas horitas de cena, risas, fotos, pulpo y vino, y más pulpo y mas vino, nosotros 5 estuvimos tomando unas copillas en el pinocho hasta eso de las 3 de la mañana. Después volvimos al albergue. Siento la simplicidad pero estoy muy cansado. Mañana intentaré describir más.
Quedan 54 kms
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