Villar de Mazarife

Muy muy dura la etapa de hoy de 20 y picos kms pero con una resaca linda de escribirla.
Nos hemos despertado Justo, Luis y yo a las 9 y media, casi completamente solos, solo quedaba la pecosita catalana que ayer estuvo peregrinando tb por donde nosotros.
Tras el pastillazo con un cafelito y unas galletitas, porque hoy no entraba ni cerveza ni na, hemos ido a despedir a Justo que se marchaba ya para Mutriku. Te digo lo que al Xavi, tienes casa en Granada pa lo que quieras y nos vemos en las próximas fiestas de Donosti.
Como nos hemos quedado a esas horas solos flashman y yo, pues hemos aprovechado pa tomarlo con tranquilidad y dando un paseíto hemos deshecho todo lo andado anoche y visitado el hotel Hostal San Marcos que es una maravilla.
Los 8 kms hasta la virgen del camino los hemos hecho medio bien, porque íbamos caminando por la ciudad y apenas si lo hemos notado. A la salida es donde hemos estado durante un rato de cuál de las dos sendas que habían cogíamos, la de la carretera o caminitos de cabras, y hemos elegido la segunda. El problema era que cada una llevaba a pueblos diferentes.
En ese cruce hemos conocido a Evi, una italiana mu guapetoncilla que es de noseque pueblo que esta al sur de Italia, enfrente de Grecia, y que vive en Siena. Su primer día en España y no habla español ni ingles. La conversación italoespañola del camino como os imaginareis ha sido fluida. Pues la chica quechua ya se ha apuntado a nuestro carro y se ha venido aquí a almorzar y al albergue con nosotros, supongo que hasta que cuadre con unos italianos que, aunque aquí el menda ha estado 5 intensos días en Roma, hablen algo mas con ella.
Tras varias horas por carreteras y caminos sin fin, hemos llegado a las 15,30 al pueblo sin haber tomado amaiketako y con la boca como un estropajo.
Lo más gracioso que ya estaba todo cerrado, el bar no tenia comida y el albergue tío pepe completo. Nos han sacado unas tapillas de jamón, queso y embutidos varios y con eso hemos almorzao.
A continuación a buscar un nuevo albergue y de nuevo nos hemos equivocado. Estaba a la entrada del pueblo el albergue san Antonio de Padua, una especie de chalet muy chulo con un gran jardín y que dan churros con chocolate para desayunar.
Pues resulta que cuando hemos llegado estaba completamente vacío, solo el pobre de Roy que como nosotros tb se ha equivocado y varios guiris.
Absolutamente todo el mundo se ha ido al albergue Jesús, una casa hippie con una jardín impresionante con piscina y barco, en el que todo el mundo duerme viendo las estrellas y la forma de pagar es dando la voluntad y pintando o escribiendo algo en la pared. Un sitio mágico de verdad.
Nosotros hemos tenido que conformarnos con el nuestro que por lo menos estamos 4 gatos y hemos echado una siesta de escándalo.
Hoy se ha cambiado el orden, almuerzo, siesta y después ducha; por orden de necesidad.
Cuando nos hemos levantado, hemos cogido Luis, Roy y yo y nos hemos ido a visitar a esta gente al otro albergue hemos estado con ellos un raro, cantado junto a la guitarra media sevillana y echándonos una fotillos, y ya hemos enganchado a Cesar y Ena y nos hemos ido a tomar la primera y última cervecita del día.
Antes hemos pasado por el museo de Monseñor, y hemos visto los últimos toques del renacimiento que puede dar una persona en el mundo.
Tras la cervecita hemos cenado ligerito y hemos vuelto con Evi, que la hemos encontrado paseando, a despedirnos de la gente al albergue Jesús. Daniel, Simona y Silvia, los italianos fans de la sangría me han dicho que mañana nos harán el tan esperado risotto.
Ya estamos en el albergue, todo el mundo acostadito, yo sudando como un pollo y seguro que todos los observadores de estrellas pasando frio, pero pasando una bonita noche de verano en el lugar idílico para ello.
Quedan 286 kms